Elige bien dónde colocas el router El lugar donde lo colocamos influye mucho en la señal, por lo que podemos pagarlo caro. Lo ideal es s...
Elige bien dónde colocas el router
El lugar donde lo
colocamos influye mucho en la señal, por lo que podemos pagarlo caro. Lo ideal
es situarlo en el centro exacto de tu domicilio, lo que ayudará a que la señal
se reparta por toda la casa.
Asimismo, es importante
colocar el router en alto, ya que las ondas se envían hacia abajo. Si no se
hace así, se desaprovecha parte de su alcance.
Finalmente considera que
rodea el router. No hay que colocarlo dentro de un mueble o armario. Cuanto más
liberado esté de obstáculos, mejor será la cobertura.
Coloca bien las antenas
Un error muy común con
los routers tiene que ver con las antenas, ya que no nos preocupamos demasiado
en su orientación, dejándolas generalmente en vertical, algo que no es
recomendable.
Lo mejor es colocar una
horizontal y otra en vertical, ya que la recepción de radio se maximiza cuando
tanto el cliente como el punto de acceso coinciden con la polarización. En
resumen, hay que dibujar un ángulo de 90 grados entre ellas. Con esto no se
gana en velocidad, pero sí en cobertura.
Elige y distribuye bien las bandas
Hoy en día la mayoría
de los routers son de doble banda, es decir, funcionan en la banda
"vieja" de los 2.4GHz y también de 5Ghz, dos bandas con diferentes
características. ¿Cómo saber cuál es cuál? A la hora de conectarte, verás
el apellido "5G" en el nombre del WiFi.
- La banda
de los 2.4GHz suele tener más interferencias y es más lenta, pero llega más
lejos.
- La
banda de 5GHz está menos utilizada, alcanza velocidades más altas y es más
ágil, pero su alcance es más corto y sufre más con las paredes y obstáculos
Para ordenadores,
videoconsolas o la tele, tres dispositivos donde interesa una buena velocidad
de transferencia de datos, mejor usar la de 5Ghz. Eso sí, es importante que
estén cerca del router.
Para móviles, tabletas,
robot aspirador y similares donde importa la cobertura, usa el de 2.4 GHz. Los
dispositivos más simples y antiguos solo son compatibles con la banda de 2.4
GHz.
Mantén tu router actualizado
Es importante
habituarse a las actualizaciones, ya que vale para cualquier aparato
"conectado" a internet y permitirá mantenerlo en buen estado durante
más tiempo, mayor seguridad y aprovecharlo más.
El firmware es el
programa que controla el funcionamiento del dispositivo y cada cierto tiempo,
los fabricantes lanzan actualiaciones para mejorar sus prestaciones.
Hay bastantes routers
que realizan esta tarea de forma automática, pero si no es así, hay que hacerlo
a mano. Hay que buscar en el manual para saberlo y acceder a la administración
desde la IP 192.168.1.1 o 192.168.0.1 desde un navegador.
Busca los canales menos saturados
Seguimos dentro de la
pantalla del administrador del router, un sitio donde se puede cambiar tanto el
nombre de la red. Allí se encuentra el Control Channel donde elegir alguno de
los canales entre el 1 y el 13.
Normalmente el canal
menos congestionado se elije de forma automática, pero este modo auto no
siempre es fiable, así que se puede probar a cambiar. ¿Por cuál? Podéis
descargar la aplicación Wi-Fi Analyzer en vuestro móvil para que, sin meter
ninguna contraseña ni nada, veáis que canal es el más recomendado.