Hoy en día estamos acostumbrados a trabajar con aplicaciones y servicios en la nube a las que accedemos, de una manera muy simple, a través ...
Hoy en día estamos acostumbrados a trabajar con aplicaciones y servicios en la nube a las que accedemos, de una manera muy simple, a través de nuestro navegador. Encontrar aplicaciones también es muy sencillo y, gracias a Internet, podemos localizar aplicaciones para cubrir casi cualquier necesidad; de hecho, prácticamente todos los sistemas operativos nos ofrecen markets
o repositorios en los que encontrar nuevos recursos.
En el año 1997, aunque eran muchos los usuarios que ya accedían a Internet, el soporte físico seguía siendo la vía habitual para distribuir aplicaciones. Los sistemas operativos se distribuían tanto en CDs como en diskettes
y suites como Microsoft Office también se distribuían en este doble formato. Precisamente, Office 97 fue la última versión de la suite ofimática de Microsoft en distribuirse en diskettes; una decisión bastante acertada si tenemos en cuenta que, lo que vemos en la foto, son los discos necesarios para instalar la aplicación.
Office 97 en su versión profesional se distribuia en 55 diskettes, ahí es nada.
o repositorios en los que encontrar nuevos recursos.
En el año 1997, aunque eran muchos los usuarios que ya accedían a Internet, el soporte físico seguía siendo la vía habitual para distribuir aplicaciones. Los sistemas operativos se distribuían tanto en CDs como en diskettes
y suites como Microsoft Office también se distribuían en este doble formato. Precisamente, Office 97 fue la última versión de la suite ofimática de Microsoft en distribuirse en diskettes; una decisión bastante acertada si tenemos en cuenta que, lo que vemos en la foto, son los discos necesarios para instalar la aplicación.
Office 97 en su versión profesional se distribuia en 55 diskettes, ahí es nada.